Matrimonio y Primera Revelación: el Profeta Muhammad (sa)


MÉRIDA, Yucatán (Por Imam Azhar Goraya).- El profeta Muhammad (sa) tuvo una vida extraordinaria, en muchos sentidos. La Enciclopedia Británica menciona: “...diversas fuentes tempranas, muestran que fue un hombre honesto y recto, que se ganó el respeto y lealtad de otros hombres que también eran honestos y rectos”.

Leamos un poco acerca de su vida.

Matrimonio con Jadiya (ra) (595 A.D.)


Hadrat Jadiyah (ra), una viuda rica de La Meca, al oír la fama de Muhammad (sa) de que era un joven honesto, lo empleó como su agente comercial. En este cargo condujo algunas caravanas de comercio a Siria y trajo beneficios considerables.
Hadrat Jadiyah (ra) estaba muy impresionada y le hizo una propuesta de matrimonio con la cual fue aceptada. Tenía veinticinco años cuando se casó con Jadiyah (ra), quien tenía cuarenta años y era dos veces viuda. Ella colocó toda su riqueza a disposición de su marido. Muhammad (sa) distribuyó una parte significada de su riqueza entre los pobres y eligió una vida de austeridad para sí mismo y su esposa.

Reconstrucción de la Ka`bah (605 A.D.)


Cuando el Profeta Muhammad (sa) tenía unos 35 años, los Quraish decidieron reconstruir la Ka`bah. Cuando llegó el momento de reemplazar la sagrada Piedra Negra a su posición, las cuatro familias principales de los Quraish comenzaron a disputar por quién tendría el honor de levantar la Piedra Negra.

Fue Muhammad (sa) quien logró resolver esta peligrosa disputa. Él extendió su capa en el suelo y colocó la piedra negra sobre ella. Entonces él invitó a todos los miembros principales de los Quraish a levantar la capa y llevar la Piedra a su nuevo lugar. Muhammad (sa) entonces levantó la piedra y la colocó en la nueva posición.

La primera revelación (610 A.D.)
 

El Profeta Muhammad (sa) estaba profundamente preocupado por el declive moral y espiritual de su pueblo. No podía ver ninguna manera de rescatarlos excepto con la ayuda de Dios. Formó el hábito de retirarse a una cueva en el Monte Hira, donde pasaba su tiempo en oraciones y meditación. Esta práctica continuó durante diez largos años hasta los cuarenta años de edad. En el año 610 A.D., en una noche del Ramadán, cuando estaba ocupado rezando, como de costumbre, vio a alguien en una visión quien le mandaba recitar:

Lee en el nombre de tu Señor que creó al hombre de un coágulo de sangre. ¡Recita! Tu Señor es el más benéfico; quién enseñó al hombre por la pluma; Enseñó al hombre lo que no sabía. (El Sagrado Corán, 96: 2-6)

De hecho, fue el Arcángel Gabriel quien le había traído la primera revelación coránica de Dios. Éste era evidentemente el comienzo de su profecía. Tenía miedo ante esta gran responsabilidad de Dios.
Su esposa Jadiyah (ra) le dio apoyo moral y le aseguró que Dios nunca lo dejaría solo en su misión Divina. Jadiyah (ra), luego llevó el Profeta a su primo, Waraqa bin Naufal, un cristiano. Había estudiado algunos de los libros sagrados de los profetas anteriores. Por eso, al oír lo que el Profeta le contó, dijo:

"El ángel que descendió sobre Moisés, estoy seguro, ha descendido sobre ti "(Bujari).

Clases de Islam


Para aprender más acerca del Islam puede asistir a los reuniones acerca del Islam, oraciones, clases de árabe, estudios del Corán, Hadiz, libros del Mesías Prometido y clases de predicación.

La Mezquita de la Comunidad Musulmana Ahmadía (Calle 60 x 51 No. 453ª, Centro de Mérida, Yucatán)

999 129 4594 (cel. + whatsapp),  999 924 2222 (mezquita)

comunidadmusulmanaahmadia@gmail.com
www.alislam.es

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente